El marketing digital es una estrategia imprescindible para que tu marca crezca, se posicione y venda, que engloba todas las acciones publicitarias y/o comerciales, que se realizan en Internet.

Desde la introducción de la web 2.0, Internet es mucho más que un medio de búsqueda de información, es una gran comunidad donde intercambiar información en dos direcciones. El feedback –o retroalimentación, respuesta o reacción– es fundamental entre marca y usuario, con los pros y contras, que ello conlleva.

Recuerda que la inmensa mayoría de tus potenciales seguidores, suscriptores y/o clientes, están ahora mismo ‘navegando’, y solo es cuestión de ganarte su confianza para captarlos, cosa que no puedes hacer de cualquier manera, si no quieres fracasar estrepitosamente.

Tener una página web y dejarla a su suerte navegando sola por el ciberespacio no te va a ser rentable. Tu web no es una tarjeta de presentación, es el canal de comunicación e información de valor que vas a enseñar de ti al mundo.

Herramientas

El marketing digital – o marketing online– dispone de una serie de herramientas para realizar, desde pequeñas acciones por muy poco dinero, hasta complejas estrategias –más costosas– en las que puedes combinar diversos recursos y técnicas. Estas son las principales:

Web o blog

Desde donde centralizar tus campañas y estrategias de marketing digital para atraer usuarios y que se conviertan en clientes, gracias a tu contenido de valor ¡y no intrusivo! –inbound marketing–.

Aparte, web y blog se pueden usar de manera complementaria o paralela, de otras acciones digitales para dar mayor visibilidad a tus campañas: redes sociales, plataformas de vídeo, foros…

Una vez tengas claro si quieres una web, un blog, o ambas –nuestra opción favorita–, tras tu decisión, deberás tomar otras importantes como:

Buscadores

Google, Bing, Yahoo… son herramientas que nos permiten encontrar contenidos relacionados con aquello que se está buscando en Internet.

Para poder posicionar con éxito una página o blog en las primeras posiciones de los buscadores y conseguir visitantes, es imprescindible realizar acciones de posicionamiento orgánico –SEO. Search Engine Optimizationo de pago –SEM. Search Engine Marketing– en tu estrategia de marketing online.

Publicidad display

Es la especialidad más tradicional del marketing digital –como la clásica valla publicitaria, pero online–. Hablamos de anuncios –banners– de diversos tamaños y formato como textos, imágenes, gráficos, vídeos…– que ocupan su espacio, de una forma atractiva y llamativa en la red de redes.

Email marketing

Se trata de la heredera del clásico ‘buzoneo’, y es la más veterana y eficaz de las estrategias, por haber sabido adaptarse a los cambios, y por su capacidad de trabajar en combinación con otras estrategias.

Estas pueden ser el seguimiento y la nutrición de leads, –lead nurturing– técnica de inbound marketing basada en la creación de relaciones de valor con tus usuarios, con el objetivo de acompañarlos durante su proceso de compra.

¿Sabías que el 73% de los leads que captas, jamás se convierten en clientes? Por ello, es indispensable entregar al usuario, contenido que le aporte valor para crear confianza, y que le ayude a avanzar en su compra.

Redes sociales

Facebook, Twitter, Linkedin, Instagram…­ Aparte de crecer masivamente y ganar popularidad desde la aparición del marketing digital, además, han sabido ajustarse requetebién a los cambios y demandas de los usuarios, y a sus hábitos de consumo.

Las redes sociales son eficaces para la difusión de contenidos, la creación de tu comunidad de marca, branding ­ –creación y gestión de tu marca–, e incluso en la compra online, las campañas de publicidad online segmentadas, la gestión de crisis, y la atención al cliente.

Ventajas

Como ya te hemos comentado, la gran mayoría de posibles clientes, están constantemente conectados a Internet, y no solo desde el ordenador, también a través de sus teléfonos móviles y tablets, desde los que hacen sus compras, rápida y cómodamente. Esto le ha posibilitado un amplio abanico de ventajas al marketing digital, destacando:

Gastos factibles

El marketing online es accesible, en términos de costes, sobre todo comparándolo con los canales de marketing tradicionales – televisión, radio o prensa escrita–. De hecho, es una oportunidad inmejorable para que PYMES ganen mercado.

Debes saber que la lucha ya no se hace sobre el espacio sino sobre la atención. El usuario quiere valor, quiere información de utilidad para solucionar sus problemas. No compramos productos o servicios, compramos soluciones.

Capacidad de control, optimización y perfeccionamiento

En una campaña de marketing digital, puedes recoger y consultar, y en tiempo real, los resultados obtenidos, y de manera exacta. Su rendimiento está disponible en cualquier momento, a través de las interacciones de los usuarios –algo que no puedes obtener con la publicidad tradicional–.

Todo puede ser medido, para saber el impacto de tu estrategia, qué repercusión está teniendo y en qué sectores, y hasta el ROI. –Resultados obtenidos, beneficios, y retorno de la inversión–.

Es “pivotable”

La información que obtengas de una campaña de marketing digital te permite ajustar tu estrategia cuantas veces necesites, para mejorar los resultados. A esto se lo conoce como «pivotar». No hace falta que una campaña finalice para cambiarla o mejorarla porque lo puedes hacer en durante su proceso.

Segmentación optimizada

El marketing digital te posibilita realizar una división más personalizada para tu cliente ideal, aplicando las categorías de segmentación: sexo, localización, edad, idioma, país, nivel cultural, hábitos de consumo…

Pero esto no es todo, también podrás segmentar en función de:

Creas branding

¿Sabías que estar presente en la red, usando técnicas de marketing digital tiene un impacto directo e indirecto en tu marca y branding?

Según la Asociación de Española de Empresas de Branding –AEBRAND–“El branding es la gestión inteligente, estratégica y creativa de todos aquellos elementos diferenciadores de la identidad de una marca –tangibles o intangibles–. Que contribuyen a la construcción de una promesa y de una experiencia de marca distintiva, relevante, completa y sostenible en el tiempo”

El branding te ayuda a:

  • Definir tu propuesta de valor, o ventaja competitiva.
  • Diseñar una estrategia competitiva, orientada a tu mercado y en línea con tu estrategia de negocio.
  • Posicionar tu marca entre la competencia.
  • Entregar atributos y valores a tu marca.
  • Trabajar la capacidad “más humana” de tu empresa.

Ten en cuenta que el tipo de mensaje que divulgues, habla de ti, tus valores, cultura, profesionalidad y credibilidad. 

Te permite crear comunidad

El marketing digital también te concede poder crear una audiencia de los usuarios que tienen intereses similares del contenido que publicas.

Tener una comunidad propia, te deja conocer e interactuar de manera directa y personal con tus seguidores y clientes, y no debes desaprovechar esta oportunidad.

Es permanente y omnipresente

Tu dinamismo es importante. Antes se competía por el espacio –y se pagaba por ello– pero ahora debes centrarte en la atención. Internet te regala que tu empresa sea visible, todos los días del año, todas las horas del día, y en cualquier lugar del mundo.

Esto es genial, pero también quiere decir que sin fronteras, la lucha por captar la atención del usuario es cada vez más competitiva y profesional.

Qué ganas con el marketing digital

Tú, como usuario y consumidor, ¿te fiarías de una marca que no tuviera presencia online? Porque, ¿qué imagen puede dar una empresa y qué probabilidad tiene de posicionarse en el mercado actual, en el que “todos” estamos en Internet?

El consumidor actual es más independiente que un cliente tradicional. Está mejor formado e informado, investiga, indaga, compara productos, y por lo general, se mueve con soltura a través de la red.

Por eso es fundamental desarrollar estrategias orientadas a su entorno, y aprender a exprimir las capacidades del marketing digital. ¡Qué son muchas!

Realizar estrategias de marketing digital no solo te ayudará a conseguir nuevos usuarios, sino también a convertirlos en clientes fieles, ¡y felices!